Algunos empresarios mayores están aprendiendo cómo conseguir que sus ahorros para la jubilación financien el negocio de sus sueños.
Jim Butenschoen dejó su sector para abrir una academia de estilismo en Arkansas. Randal Smith dejó el mundo empresarial para abrir una tienda de óptica al por menor en Missouri con su mujer.
Al contrario de lo que se piensa, el espíritu empresarial no es sólo para veinteañeros. Según el Índice Kauffman de Actividad Empresarial, en 2012 casi una cuarta parte de las nuevas empresas fueron creadas por empresarios de 55 años o más.
Mientras que los veinteañeros tienen lo que hay que tener cuando se trata de estar dispuestos a quedarse despiertos toda la noche comiendo pizza mientras trabajan, las personas mayores tienen grandes ventajas: un conocimiento más profundo y extenso de muchos años de experiencia en el trabajo.
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Además, algunos empresarios tienen experiencia de gestión y grandes redes profesionales.
No todos los mayores de 50 años encuentran atractiva la perspectiva de emprender. La incertidumbre financiera puede ser demasiado para el estómago, y la cantidad de trabajo que implica el lanzamiento de un negocio es considerable.
Sin embargo, ser dueño de su negocio equivale a un nivel de autonomía y realización que no podría tener de otra manera.
La Fundación MetLife en Estados Unidos informó de que el 25% de los baby boomers encuestados esperaban crear una empresa en los próximos cinco a diez años.
Jim Butenschoen, de 65 años, estaba harto del mundo empresarial después de pasar 20 años en él y quería montar un negocio por su cuenta. Hace ocho años abrió la Academia Profesional de Diseño Capilar, que empezó con seis empleados. Ahora tiene 32 y cuatro establecimientos.
"A pesar de los altibajos, no he hecho nada más satisfactorio", dijo. Cada día tiene más desafíos y obstáculos, pero son mis desafíos". Aunque mucha gente de su edad se jubila, él dice que "no quiero dejar de trabajar porque me divierto mucho".
Los empresarios mayores pueden hacerlo.
Observó una nueva empresa. Después de trabajar durante 30 años en el sector de la óptica, Randal Smith decidió emprender un negocio con un socio de confianza, su esposa Janeel
.
Los Smith, ambos de 50 años, retiraron sus fondos de ahorro Hace dos años abrieron eyeSmith Sport & Fashion Optical, una óptica en Kansas City, Missouri. Que vende productos de moda y deportivos con receta para ayudar a ver bien.
"Rand estaba cansada de la vida corporativa", dice Janel. "Ha sido muy divertido levantarse cada día e ir a trabajar porque sabemos lo que es importante: nuestros clientes".
Transformar una afición en una forma de vida. Estos empresarios de más de 50 años transformaron sus pasiones en segundas carreras y no podrían estar más contentos.
Para quienes sueñan con convertir su afición en una forma de vida o quieren ser su propio jefe, una segunda carrera como empresario puede ser una buena solución.
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